martes, 28 de septiembre de 2010

La mano amiga

Todos podemos cometer errores  y torpezas.
Si nos atacamos entre nosotros contribuimos a que el  problema se haga más grande.
Las relaciones de verdad, la auténtica confianza, la complicidad sana y bonita no se crea en medio de nuestros éxitos y aciertos, si no cuando en nuestras caídas alguien nos da la mano para que nos levantemos.
Las relaciones también están en crisis, quien no conoce a alguien que se esté separando en este momento.
Estamos en un momento de cambio de paradigma en todos los niveles, el de la mujer y el hombre viene de años y años de sumisión de la mujer y en su tiempo funcionaba, luego vino el feminismo y todas enfadadas, tampoco funciona ya. Es encontrar una nueva manera de relacionarnos, ni dependientes ni enfadados. Es compartir en conciencia y eso lo hace la meditación, es la mano amiga.
Aprende a escuchar y hablar de "Buda a Buda", del ser interior a ser interior.

¿Cómo se hace? Practicando, ensayando y equivocandote en clase, para luego aplicarlo a tu vida diaria.

1 comentario:

  1. Es una entrada preciosa. Madurar, vivir, andar y tropezar para luego andar un poco más. Compartir y aprender de lo compartido, blanco o negro, gris o colorido. Gracias por tus palabras que vienen del corazón, llenas de sentido!

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